Sábado 17 de diciembre del año 2022, es la fecha esperada. Este fin de semana que viene se producirá el tercer enfrentamiento entre G. Golovkin y Saúl “El Canelo” Álvarez.
Muchos dirán que el pleito llega tarde, puede que tengan razón. Han pasado años desde que se celebrara aquel segundo combate en que venció por decisión controvertida el campeón mexicano.
Los más drásticos dirán que es un combate fácil para el Canelo que a sus 31 años se encuentra en su prime frente a un triple G que ya cumplió los 40. Yo, sin embargo, no creo que sea fácil, es más, apuesto que será más disputado de lo que algunos creen.
Golovkin quizás no sea el que era, la edad no pasa en balde y condiciona en todos los deportes, pero el Kazajo viene de aplastar en Japón a Murata que no es ninguna princesa dulce y delicada.
¡Y de qué forma!, machacándolo lentamente, y recibiendo mucho castigo por parte del nipón que supo presentar batalla.
Obviamente, sabemos que Murata no es el Canelo, pero es un muy buen boxeador y Golovkin sigue siendo campeón del mundo de los medianos.
¡Que el combate se va a celebrar en el peso súper mediano!. Es algo que por otra parte, si puede ser determinante, para mí, mucho más que el factor de la edad.
Esa diferencia de peso corre a favor de Saúl, que está plenamente asentado en la categoría que domina y como reaccione triple G en el peso superior es una incógnita.
Técnicamente, sabemos que Saúl sufre con los más dotados, pero Golovkin (siendo un fuera de serie) no entra en ese rango. No es Lara, Bivol ni mucho menos Mayweather.
Triple G es un asesino silencioso, pero Saúl también lo es, así que en ese aspecto estarán a la par.
La velocidad es el elemento diferenciador que está a favor del Canelo que es mucho más rápido que su rival.
Ambos son espléndidos como encajadores y hasta el día de hoy nadie ha conseguido aplastarles, así que se me hace difícil ver ese ko que tanto promete el Canelo.
Y este si es un factor que corre a favor del kazajo: la estrategia.
La presión popular corre en contra del mexicano que parece obligado a ganar por ko para refrendar su posición como mega estrella del mundo del box.
Por otra parte, Saúl ha dicho en varias ocasiones que va a ganar por ko y puede que se vea obligado a presionar y correr riesgos para lograrlo.
¿Sabra Golovkin jugar con esa presión o ansiedad del mexicano?
¿Podrá el mexicano soportar esa presión y cumplir con lo que ha declarado?
Francamente, es difícil de acertar.
Sea como sea, es posible que veamos otro combate muy cerrado. Los detractores del Canelo lo machacarán a no ser que venza de manera espectacular y por la vía rápida. Y Golovkin está ante la oportunidad de retirarse con honor o tirando su legado por los suelos a cambio de un enorme puñado de dólares.
¿La derrota ante Bivol puede pesar? Puede, pero no debería. Todo dependerá de lo sereno y concentrado que esté el Canelo.
Muy pronto tendremos las respuestas, no se lo pierdan.
Marcos Nogueroles Hernández