Marini salva el honor del Mooney VR46 al acariciar el podio

No hay duda de que el Gran Premio Gryfyn de San Marino y de la Riviera de Rimini del pasado domingo fue un día para olvidar para el Mooney VR46 Racing Team. En Moto2™, el ‘poleman’, Celestino Vietti, se fue al suelo y las esperanzas de título del piloto de 20 años se alejaron aún más, antes de que su compañero, Niccolò Antonelli, también sufriera una caída pocas vueltas después. En la clase reina, el rookie Marco Bezzecchi no pudo aprovechar su ascenso a la primera fila de la parrilla al perder el tren delantero de su Ducati GP21 en la curva 10 en los primeros compases de la carrera.

De esta forma, la presión recayó sobre los hombros de Luca Marini para salvar el honor de la escuadra del ‘Doctor’. Y el italiano lo logró con un impresionante pilotaje hasta la cuarta posición, en su intento por alcanzar su primer podio en MotoGP™. A pesar de ser 19º al final de la primera jornada, el piloto de 25 años consiguió una gran vuelta en la Q1 para ganarse un puesto en la Q2 y lo utilizó como trampolín para la batalla del domingo. Tras desafiar a Enea Bastianini (Gresini Racing MotoGP™) y a Maverick Viñales (Aprilia Racing), finalmente tuvo que conformarse con un cuarto puesto -mejor resultado de su carrera- ante la afición local.

«Creo que empezamos bastante lejos el viernes», comenzó Marini el domingo por la tarde. «Nos recuperamos un poco el sábado y esta mañana la moto iba bien. David (Muñoz, Crew Chief de Marini) ha hecho un buen cambio en mi moto y mi equipo ha trabajado muy bien. Creo que el ‘feeling’ que tenemos en el garaje es fantástico, así que quiero darles las gracias porque somos un equipo muy bueno y es un placer trabajar con ellos».

«Sobre mi ritmo, estoy realmente satisfecho. No esperaba ser tan rápido desde la primera vuelta hasta el final. Obviamente, los tres primeros tenían algo más. Cuando los neumáticos eran buenos podía mantenerme ahí, pero vuelta a vuelta sentía un pequeño bajón, así que tenía que reducir un poco mi ritmo. Además, seguir a otras motos es difícil porque la temperatura es muy alta y la presión de los neumáticos sube, la temperatura del motor aumenta en cada vuelta, así que no es fácil».

«También era difícil adelantar, así que, al final, solo intenté utilizar bien los neumáticos y esperar a las últimas vueltas para ver si Maverick sufría una caída -de las gomas- y así poder intentar atacarle y subir al podio. Pero no ha sido así. De todos modos, estoy muy satisfecho con este fin de semana porque hemos trabajado muy bien y me ha encantado pilotar la moto. Solo tenemos que encontrar todo un poco antes».

Entonces, ¿cuál cree Marini que fue la diferencia entre él y los que terminaron en el podio? ¿Su capacidad para conservar el neumático trasero se debe al ‘setup’ de la moto, al estilo de pilotaje o simplemente a la experiencia? «Todas esas cosas juntas. No creo que haya sido nada en particular. Fui muy fuerte en la frenada, solo perdí un poco de tiempo en la salida de la curva 6, la curva 8 y la última curva. Luego, en el sector 3, en cada vuelta he ganado mucho y me he sentido muy cómodo en el sector rápido. Me gusta cuando puedo ser rápido en curvas rápidas. En cambio, en esas tres curvas perdíamos un poco. Creo que ahora tenemos muchos datos para intentar analizar e intentar dar un paso adelante en el test. Es un momento muy bueno para nosotros al tener el test después de una carrera tan buena».

«Podemos encontrar las últimas cosas que nos ayuden a luchar por el podio en cada carrera y también por la victoria. No tenemos muchas cosas que probar, pero podremos hacer algo. No he hablado con mi equipo sobre lo que vamos a probar pero seguro que será algo en general: en la parte delantera, en la trasera, para hacer que la moto gire un poco más, pero también para mantener la misma confianza que tengo en la frenada».