Maneja tu profundidad de lanzamiento en serio. El mánager de Houston, Dusty Baker, se ha acercado al uso del bullpen con mucha menos urgencia que su contraparte canadiense Rob Thomson, claramente prefiriendo guardar a los relevistas si es posible apoyándose en sus abridores para superar situaciones de alto estrés.
Eso muy bien pudo haberles costado a los Astros en el Juego 1, cuando un Justin Verlander inestable se quedó adentro durante cinco entradas, lo que permitió a los Filis completar una remontada, y nuevamente en el Juego 3, cuando Lance McCullers Jr. se quedó adentro para usar siete carreras de daños:
DATO:
— Nilson Pepén (@JuniorPepen) November 4, 2022
El bullpen de los #Astros ha permitido cinco carreras limpias en 51 1/3 entradas en la postemporada. Después de trabajar siete entradas en los últimos dos juegos, el día libre de hoy le vendra bien el descanso, con la oportunidad de ganar la #SerieMundial mañana.
Pero ahora, saliendo de un mal día para restablecer el bullpen y con solo dos juegos para el final, ya no hay excusa para guardarse el bullpen ni nada por el estilo. La gran ventaja de los Astros en el lado de los lanzadores es que tienen la profundidad para traer a un lanzador de relevo dominante ante cualquier señal de problemas y todavía les sobra mucha profundidad.
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Baker ahora necesita manejar con esa agresividad, e indicó el pasado jueves que buscaría hacerlo. Otra correa larga inoportuna podría darles a los Filis la oportunidad de volver en la Serie Mundial y mandarla al Juego 7 el domingo en el mismo Minute Maid Park.
